domingo, 23 de octubre de 2011

Una ciudad para andársela (...y comérsela): (Parte Four)

Salimos del apartamento dispuestos a disfrutar nuestro último día completo en París y lo primero nos dirigimos hasta el mercado de Alligre, de nuevo viandas y alimentos frescos, pero esta vez también tienen un rastro con objetos de segunda mano. Tras echar un vistazo y comprar alguna cosina, cogemos el metro y nos acercamos hasta el museo d´Orsay. Dentro no se podían sacar fotos, así que solo puedo decir me gustó mucho, mucho más que el Louvre, donde va a parar...

Salimos caminando por el Bulevar de St. Germain hasta los jardines de Luxemburgo; vamos viendo a nuestro paso todas las tiendas de lujo y de diseño, esas tiendas que le refrescan a uno la memoria de por qué es necesario que nos toque la lotería de Navidad proximamente...
Escaparate de una tienda de paraguas de lujo, el de la foto con visón!

Jardines de Luxemburgo

Después del paseo comemos junto al Panteón, por fin probamos los crepes salados y de postre crepes dulces, muy ricos, sí señor!




Lástima de no tener la tarjeta Velib!! (se compra en la oficina de turismo), no podemos ir en bici hasta la torre Eiffel, por lo que cojemos el metro.
Al llegar encontramos una enorme cola para comprar los tickets y subir en ascensor, y hay muy poca gente en la cola de los tickets para subir por las escaleras, así que nos armamos de valor y hacemos valer las visitas al gimnasio, y subimos los 670 escalones que hay hasta el segundo piso, y de ahí para arriba cojemos el ascensor como el resto de los mortales. Tengo que decir que subiendo, nos adelantó una chica embarazada, así que la proeza no es de las que hacen historia... 
Las vistas desde la cúpula no se pueden describir con palabras, solo son equiparables a las del Empire State Building.

A la izquierda la cola del ascensor, a la derecha la NUESTRA


Al bajar nos fotografiamos en el Campo de Marte con la torre de fondo; sí nosotros también nos hicimos las típicas fotografías chorra pero es que nos reimos tanto y quedan tan bien...

Continuamos ruta hacia los Campos Eliseos a comprar unos Macarons en Ladurée, nos vamos mañana y queremos llevarlos pero solo se conservan en buen estado durante 4 días en la nevera.
Agotados pero con esa sensación del ahora o nunca, nos dirigimos al museo Georges Pompidou, que siempre merece una visita, y volvemos hacia la Bastilla atravesando el bonito y animado barrio de Pletzl.


No hay comentarios:

Publicar un comentario