jueves, 20 de octubre de 2011

Un ciudad para andársela (...y comérsela): (Parte Two)

El desayuno fue lo mejor, pues el curasán estaba buenísimo, y con las pilas recargadas nos dirigimos hacia la línea 1 del metro para ir directamente al museo del Louvre, donde pasamos buena parte de la mañana. Allí vimos todos los grandes éxitos y algunas cosas más pero llegas a agobiarte pues hay tanto y tanto que ver... Las guías dicen que si una persona quisiera escuchar con atención todo lo que dice la audioguía y se parase a admirar todas las obras que hay dentro, tardaría 9 MESE$$$, increible!
GRANDES ÉXITOS: La Victoria de Samotracia, La Mona Lisa, etc......




 Al salir caminamos por el barrio de Les Halles, visitando sus múltiples galerías comerciales, que se mantienen igual que hace un siglo cuando se abrieron, también entramos en el jardín del Palais Royal, y entre tanto yo ya llevaba el estómago en el suelo pero había tanto que ver que se nos hizo tarde para comer, así que optamos por un auténtico restaurante italiano donde comimos pasta y una pizza marinera.












Continuamos por este barrio y en una de sus múltiples tiendas de utensilios de cocina, encontramos un sirope de avellana que llevábamos años buscando. Mientras os acercamos a La Orangerie para ver el museo y aprovechar una exposición temporal  de arte español "De Zurbarán a Picasso", muy recomendable.




Al salir, todavía era de día y nos tomamos un descanso reparador en las sillas que bordean el estanque del jardín de las Tuileries, sin duda allí tomé una de las mejores fotos: repanchingada en la silla-tumbona con los pies en alto (como los vieyos), disfrutando de las vistas y del silencio a mi alrededor (el parque colgaba el cartel de completo pero solo los españoles hablamos a voces!), en definitiva, allí relajados hubiéramos permanecido toda la eternidad....


Pero hubo que continuar viaje, avanzando por los Campos Eliseos y su avenida homónima, la noche se nos viene encima y ya nos vamos acercando al Arco Del Triunfo, también incluido en la París Museum Pass, por lo que subimos los 230 escalones de rigor y desde su azotea observamos la maravillosa panorámica de las doce avenidas que parten desde esta plaza Charles De Gaulle, cada una hacia una punta de París.



Y con el recuerdo de las hermosas vistas desde el Arco del Triunfo nos fuimos de nuevo al metro, aunque pensándolo bien, creo que nos acordábamos más de los 230 escalones que hubo que subir y bajar....

No hay comentarios:

Publicar un comentario