Lo empecé con una gripe exprés: viernes por la tarde a tope de fiebre, sábado como si me hubieran pegado una paliza y el domingo ya casi no tenía nada, ¿?
Aún así celebré el día del PAPI en Mieres cenando de lujo y el domingo "¡qué bien lo pasemos!" comiendo y recogiendo la invitación para un evento muuy especial...
¡Qué vivan los novios! |
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